Muchas veces me han preguntado que como analista de innovación ¿qué tienen las fintechs que no tengan los bancos? Y ¿por qué ahora las fintechs son las más grandes amenazas para las financieras?. Bueno aquí les comparto mi respuesta.
En El salvador se vive una gran crisis económica que realmente se transforma en una crisis de educación financiera de la cual son pocos los bancos que se hacen cargo de ella. Los salvadoreños le dan el sí a las fintechs y cajas de crédito ya que son las que dan lo que el cliente necesita en el momento que lo necesita y con pocos requisitos pero con tasas de intereses altas.
Yo veo este tema bajo la siguiente analogía: Imagínense una rastra que lleva mucha carga de productos (en este caso son los bancos) e infinidades de procesos nacidos hace 50 años y probablemente renovados cada 2 años y mucha gente tratando de manejar la rastra, que hace que esta se mueva de un lado hacia otro con miedo a chocar por el cambio o actualización de alguna pieza que sostiene sus productos aunque se sepa que esta es ineficiente. Esta rastra va por una carretera ancha, pavimentada, segura y con muchas cámaras vigilantes de su trayecto que estas a su vez son difíciles de actualizar con respecto al rango que tienen de vigilancia.
Por otro lado hay muchos carros o tractores más pequeños (en este caso las fintechs) con poca carga de productos enfocados en una necesidad, poco personal siguiendo una visión y procesos nacidos en este momento digital generando valor al cliente más rápido; además de bajo costo con capacidad de llegar y desviarse a sectores en donde la rastra no puede llegar, con el mismo objetivo de esta llevar todos sus productos a su cliente.
Bajo esta perspectiva las fintechs llegaron para cubrir la necesidad de los aún no bancarizados, proveyendo con tecnología y conocimiento un camino poco explorado por los bancos con la posibilidad de poder experimentar, medir y pivotear con gran velocidad para encontrar el producto acorde al segmento al que se le quiere llegar, mientras que a los bancos se les dificulta poder hacer este tipo de maniobra. Los bancos hace años iniciaron como una fintech o quizá emprendedurismo de aquellos tiempos pero poco a poco olvidaron su esencia y se enfocan más en la colocación de todos los productos que tienen partiendo desde un diseño que anteriormente funcionaba (diseñar productos de adentro hacia afuera) pero olvidan la necesidad del cliente y los contextos en que este mismo se mueve que son cambiantes; ahora aún más cambiantes por la digitalización del cliente.
Es por esto que se debe iniciar un nuevo proceso de diseño centrado en las personas (Diseño de afuera hacia adentro) iniciando con la observación profunda de la necesidad del usuario o cliente y pasar por un proceso largo pero hermoso de conversación y observación del cliente para así conocer e identificar sus dolores más críticos y generar propuestas de valor que los hagan crecer como personas o como empresas.
Aún hay luz al final del túnel para los bancos pero deben iniciar el proceso de construcción de cultura al servicio del cliente y empezar a utilizar metodologías como agilismo, lean startup, design thinking, jobs to be done, disrupt para dar inicio a este mundo extraordinario de la empatía con el cliente.
Estoy de acuerdo con ello